¿Un local de diseño, diferente, con neones fúcsias y que se denomina ‘malos modales’? Dicho y hecho. Nos estaba llamando a gritos. A los Food Fighters nos encanta la irreverencia y la incorrección así que… esto estaba cantado. Badmanners forma parte de los locales que Grupo Élite tiene en Altea. Concretamente, Badmanners se encuentra en la siempre atractiva Plaça dels Esports. Esta es una zona que poquito a poco se está reivindicando gastronómicamente. Resulta complicado hablar del local, que de entrada y en cuestión de diseño, ya impresiona nada mas cruzar su original portalón acristalado automático. Una grandísima barra preside el local junto con mobiliario y mesas que invitan a hacer tuyos algunos rinconcitos, todos ellos rodeados por cristaleras. Estas permiten una luminusidad inusual que convive perfectamente con el ambiénte e iluminación ténue por la que apuesta el local. Su carta acaba de ser renovada y la oferta que podemos encontrar es simple a la par que compleja: 20 platos únicos con filosofía para compartir y un estilo de cocina de fusión oriente-occidente. Una carta así invita a hacer las delicias de los mas osados con propuestas tan originales en nombre y composición como el A mamá no le gusta consistente en un cucurucho de wanton relleno de rabo de toro desmigado y espuma de queso de cabra o la Patada en la boca de magret de pato, verduras salteadas con curry thai y chutney de mango acompañado de arroz basmati o poner el fin de fiesta a la incorrección absoluta con una Orgía de papada de cerdo y mejillones, puré de guistantes y emulsión de wasabi en wrap de cogollo… Wow! 🙂